Marzo| 9
Vampiros
Hoy me gustaría narrarles mi rueda de prensa con Marcel Marceau. Resaltar cada detalle de las palabras de ese mago del silencio. Describirles lo enriquecedora que fueron cada una de sus anécdotas y vivencias. Lo maravilloso que fue ver en los ojos de ese artista de más de 80 años a un niño travieso, lleno de pasión y ganas de vivir.
Quisiera contarles de cómo hoy mi perro burló nuestros ojos y se evadió de casa cuando me devolví esta mañana a buscar el celular que se me iba quedando en la peinadora. Explicarles cómo me sentí al pensar que se hubiera perdido pudiendo haberlo evitado y expresarles el alivio que me invadió cuando subió en brazos del conserje, quien lo rescató errante casi llegando a la calle.
Ojalá pudiera contarles de mis escapadas a mitad de jornada laboral a Nunca Jamás para dejar caer las amarguras durante el vuelo y regresar cargada de sonrisas. Pero no. Resulta que ahora no hallo las palabras, no encuentro las formas ni los verbos, mucho menos sustantivos y adjetivos. Me los robaron junto con las ganas de escribir y dejaron en su lugar desazón y desgano. Vaya intercambio injusto.
Debe haber sido uno de esos siniestros vampiros que nos rodean ocultos bajo sus mascaras seductoras. Nos embelesan y, finalmente, nos succionan la sangre y la alegría sin darnos cuenta...
Deja tu huella en la superficie
¿sangre y alegria? Las ideas, las energías, la adrenalina, las ganas de vivir... Dementores, mas que vampiros, necesitan los sentimientos felices para vivir y tan solo nos dejan un grupo de emociones negativas al final del día...
Exactamente, amiga. Como siempre, eres fiel intérprete de mis desvaríos. Dónde andas metida?. Los grilletes de hielo del igloo se han converitdo en icebergs?
Buuuuuuuuuuuuuuuaaaaa no puedo entrar en la Fotonovela Planetaria :((